(Fuente: La Nación Domingo)
En su casa de Buenos Aires, el mejor actor de Argentina sicoanaliza la adolescencia de nuestros pueblos. Recuerda, los delincuentes que irrumpieron en ella el 2009 y habla de la violencia y su correlato en la injusticia. Darín mira profundo, se detiene en el Oscar y el poema que su viejo escribió para Chile. Son sus detalles, los benditos detalles de los que hablaba Nabokov.
Han sido jodidos estos últimos días para Darín. Desde que el pasado 8 de marzo “El secreto de sus ojos” ganó el Oscar a la mejor película extranjera, Ricardo Alberto Darín (53) no ha tenido pausas. “Está todo muy convulsionado… ¿Fumás…? La historia de la película generó mucha excitación, y no es que no lo desee ni me guste, me parece bien, el tema es que hay que ponerle el cuerpo a los requerimientos…”, dice.